Alemania 2006 - Ninguna sorpresa

Bella fanática alemana. Clic para agrandar.

Era de esperarse los triunfos de Alemania, Polonia y Paraguay, así como un juego muy cerrado entre Inglaterra y Suecia, mismo que acabó empatado.

Las hostilidades se abrieron con el juego entre los anfitriones alemanes y el ilusionado equipo de Ecuador. La lógica prevaleció y los teutones le recetaron un contundente 3-0 a los ecuatorianos. Alemania no usó armas secretas, ni nuevas tácticas, ni quiso inventar el hilo negro, simplemente usó lo que ha demostrado ser letal para los rivales: arribadas por los extremos centrando con fuerza, generalmente raso o a media altura, para que otro alemán cierre la pinza llegando de atrás a toda velocidad incrustando la pelota en las redes. No siempre acaba en gol, pero vaya que vuelve locos a los oponentes.

Ecuador salió con algunos suplentes, lo que se reflejó en la cancha, pues se veían confundidos. A pesar de esto, al minuto 2 estuvieron a punto de abrir el marcador con una llegada de Luis Valencia. Alemania no tardó en demostrar quién mandaba en la cancha. Al minuto 4, Miroslav Klose mandó un riflazo desde fuera del área grande para batir a Christian Mora. Más adelante Klose anotaría su segundo tanto en el minuto 44.

Salvo los dos goles de Alemania y algunos destellos ecuatorianos, el primer tiempo sin mayores emociones. En la segunda mitad, Ecuador salió más ofensivo, dispuesto a remontar el marcador, pero eso sirivió para abrirle espacios a los alemanes, quienes al minuto 57 decretaron el rumbo del encuentro con un remate de Lukas Podolski para dejar los cartones en 3-0.

Al mismo tiempo, Costa Rica y Polonia se medían en el terreno de juego. Los ticos se adelantaron en el minuto 24 por medio de un zurdazo de Ronald Gómez. Esto los hizo abrigar esperanzas de sumar puntos en este mundial, pero los polacos no estaban de acuerdo con que eso sucediera. Tras su gol, Costa Rica recurrió al viejo e ineficaz recurso de echarse para atrás, a modo de defender su magra ventaja. Lo inevitable ocurrió: al minuto 33 Bartosz Bosacki marcó el empate en polémica jugada, en donde al parecer existió una falta sobre Porras que abrió la puerta de la anotación polaca. Así terminó el primer tiempo.

Al arranque del complemento, las fuerzas estaban más o menos niveladas, hasta que nuevamente Bosacki anotó en el minuto 66 con un buen testarazo. Ahí se invirtieron los papeles y Polonia decidió esperar a los ticos, quienes con más ganas que eficacia se lanzaron al ataque, pero sus esfuerzos no rindieron frutos.

Esta ha sido la peor actuación de Costa Rica en un mundial, pues perdieron sus tres partidos para irse a casa sin un solo punto que festejar. El resultado final de 2-1 a favor de Polonia resulta un cabal balance del encuentro.

En los otros dos juegos de la jornada, Paraguay dió cuenta de un débil Trinidad y tobago al son de 2-0, mientras que los británicos y los suecos empataron a dos tantos por bando.

Inglaterra sigue teniendo un saldo negativo en el futbol que despliega. No convence, no emociona, pero sí anota. Seguramente en eso se refugiaran para justificar su deslucida actuación, que a pesar de todo, los ha clasificado como el primer lugar de su grupo.

El encuentro fue entretenido, más por méritos de los suecos que de los súbditos de la corona británica. Pero sin duda, lo mejor del cotejo fue el extraordinario gol de Joe Cole. En una clase magistral de buen futbol, recibió con el pecho el balón, y lo prendió de tres dedos antes de que cayera al piso. Desde una considerable distancia, ubicado un poco al lado izquierdo de la cancha con respecto a su ataque, Cole sacó un perfecto arcoiris que iba cruzado y angulado, entrando por el lado contrario de la meta de Andreas Isaksson. Bello, bellísimo gol, que cayó al minuto 34.

Pronto el talón de Aquiles de Inglaterra se mostró: el juego por alto, sobre todo a balón parado, dentro de su área. Así cayeron los dos goles suecos, y así sufrieron varias veces los aficionados británicos por la ridícula ineficiencia de la zaga de su representativo.

Suecia empató con un lindo cabezazo de Marcus Allback en el minuto 51. El juego era un constante ir y venir, pero con una Sueci mucho más amenazante y propositiva. Inglaterra por momentos se desdibujaba de la cancha. En el futbol no hay justicia, solamente goles, y uno de ellos fue anotado por Steve Gerrard para darle nuevamente la ventaja a los ingleses, justo cuando Suecia jugaba mejor.

Parecía que así acabaría el encuentro, con Inglaterra poniéndole fin a 38 años de no poder ganarle a Suecia, pero ésta quería su tajada de gloria. El empate mandaba a los suecos a medirse contra el anfitrión Alemania en los octavos de final, por lo que nunca dejaron de buscar el triunfo. Al verse abajo, no se desmoralizaron y perseveraron hasta ver coronados sus esfuerzos de no perder el partido. Henrik Larsson anotó su gol al minuto 90, justo poco antes de que se diera el silbatazo final quedando los cartones igualados a dos goles.

Preservaron el récord, se clasificaron a octavos de final como segundo de su grupo, pero no lograron evitar a los teutones en la segunda ronda.

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